"(...) el magnate perfiló un discurso exaltado, que situaba los
males de EE.UU. en una conspiración liderada por inmigrantes
indocumentados y potencias extranjeras decididas a destruir el país. Los
inmigrantes y los chinos, Mexico and China, se convirtieron en mantras de un Trump encendido, que los repetía hasta la saciedad, para deleite de sus seguidores.
Pero, ¿cómo logró abrirse camino ese discurso?
Para David Harvey, legendario geógrafo y teórico marxista,
la respuesta es simple, y se remonta a la salida de la última gran
crisis financiera. “Los únicos que verdaderamente se han beneficiado de
la crisis de 2007-2008 han sido el 1% más rico, y el 0,1% más rico,
mientras que todos los demás salían perdiendo”.
Harvey va más allá; en
la primera entrevista de la serie, señala que el ascenso de Trump es
inseparable de la “enorme desilusión” que han generado décadas de
políticas neoliberales. “Las poblaciones cada vez se sienten más
alienadas en sus puestos de trabajo. Encontrar un trabajo digno, con
significado, se ha vuelto cada vez más difícil. La vida cotidiana se ha
hecho cada vez más agobiante”.
En lugar de poner el foco sobre el capital y sus desmanes, sostiene
Harvey, Trump logró situarlo sobre dos reos mucho más fáciles de atacar:
China y los inmigrantes.
Wendy Brown está de acuerdo. La politóloga californiana
señala que el elemento clave del discurso de Trump –las referencias a la
construcción de un muro fronterizo con México— trata de restañar las
heridas de una soberanía lesionada por el asalto neoliberal.
La idea del
muro, sostiene Brown, “sirve para construir un imaginario de nación.
Imaginamos que somos una nación blanca sitiada por riadas de inmigrantes
no deseados, drogas y todo lo demás, y que levantamos una barricada
contra eso para proteger nuestra existencia civilizada y purificada”.
De modo que ‘Make America Great Again’ era, en realidad, ‘Make America White Again’.
Para la filósofa Susan Buck-Morss, lejos de reafirmar la
soberanía supuestamente agraviada de EE.UU., la elección de Trump
fortalece el control político de las oligarquías, a nivel internacional:
“Con la elección de Trump, el capitalismo global ha tomado el control”,
señala Buck-Morss.
“Estados Unidos es simplemente un instrumento del
capital. Ya no hay imperialismo, y esto nos sitúa finalmente más cerca
de los países del tercer mundo, que ya vienen viviendo esto desde hace
tiempo”.
Otro factor para entender tanto el ascenso político de
Trump como las correas de transmisión de poder en los Estados Unidos de
hoy es la comunicación digital, que se detienen a analizar tanto el
jurista Bernard Harcourt como el crítico de medios Douglas Rushkoff.
El goce y el deseo de autoexponerse debilitan a los ciudadanos, explica
Harcourt, y permiten a las corporaciones obtener datos para fines
comerciales o de espionaje. En lugar de observarnos contra nuestra
voluntad, lo hacen aprovechándose de nuestro deseo de retransmitir
nuestras vidas.
Rushkoff va un paso más allá, al señalar que esas mismas
empresas, y políticos como Trump, no se limitan a predecir nuestra
conducta o intentar aprovecharse de ella, sino a tratar directamente de
manipularla.
En Trump convergen los vectores de la comunicación digital, dando lugar a
lo que la teórica política Jodi Dean llama “capitalismo comunicativo”:
Trump, sostiene Dean, “no se debe al significado de lo que dice. Eso no
le importa a nadie.
Lo que importa es la sensación general que proyecta:
‘Soy un hombre fuerte, no me gustan las élites, apelo a la gente que
está enfadada’, y entonces el contenido se desvanece. Puede decir
falsedades sin parar. No creo que el problema aquí sea Trump. Es la
manera en la que funciona la comunicación en el ‘capitalismo
comunicativo’”. (...)
En neoliberalismo no murió con la elección de Trump. Si acaso, apuntan
tanto David Harvey como Wendy Brown, estamos ante una nueva fase del
proyecto. Los objetivos no han cambiado, pero sí en cierta medida la
modulación del mensaje, o su implementación. Brown habla de un
neoliberalismo “nacionalista”, mientras Harvey prefiere poner el énfasis
en una predecible deriva autoritaria. (...)" (I. G-S. / Á. G. B. / H. M. ·, CTXT, 09/11/17)
No hay comentarios:
Publicar un comentario