" El 25 de noviembre, dos días después de la fracasada subasta de bonos
del gobierno alemán en la cual Alemania fue incapaz de vender el 35% de
su oferta de bonos a diez años, el ministro de finanzas alemán, Wolfgang
Schaeuble, declaró que Alemania podría retirar sus requerimientos para
que los bancos privados que tienen deuda soberana de Grecia, Italia y
España acepten una parte del coste de su rescate cancelando una porción
de esa deuda. (...)
Obviamente, el gobierno alemán pilló el mensaje de la orquestada y fracasada venta de bonos. (...)
Extraño, ¿no es verdad? Italia, el mayor país de la UE que necesita un
rescate de su deuda, puede aún seguir vendiendo sus bonos, pero
Alemania, que no necesita rescate alguno y que se espera asuma un coste
desproporcionado del rescate de Italia, Grecia y España, no pudo vender
sus bonos.
La prueba de que la fallida venta de bonos alemanes fue algo
orquestado la tenemos en la exitosa venta de los problemáticos bonos
italianos que se produjo dos días después.
Extraño, ¿no es
verdad? Italia, el mayor país de la UE que necesita un rescate de su
deuda, puede aún seguir vendiendo sus bonos, pero Alemania, que no
necesita rescate alguno y que se espera asuma un coste desproporcionado
del rescate de Italia, Grecia y España, no pudo vender sus bonos.
En
mi opinión, la fracasada venta de bonos alemanes fue orquestada por el
Tesoro de EEUU, el BCE y las autoridades de la UE, así como por los
bancos privados que tienen problemas de deuda soberana.
Mi
opinión se basa en los hechos siguientes: Goldman Sachs y los bancos
estadounidenses han garantizado quizá un billón de dólares o más de la
deuda soberana europea vendiendo permutas financieras o seguros frente a
los cuales no tienen fondos de reservas.
Los pagos que los bancos
estadounidenses recibieron por garantizar los valores de los
instrumentos de la deuda soberana se convirtieron sencillamente en
beneficios y en bonos para los ejecutivos.
Esto fue desde luego lo que
arruinó al gigante de estadounidense de seguros AIG, provocando el
rescate del TARP (siglas en inglés del Trouble Asset Relief Program
–Programa de Ayuda a Activos con Problemas-) a costa de los
contribuyentes estadounidenses y de enormes beneficios para Goldman
Sachs.
Si alguna de las deudas soberanas europeas no se
satisface, las instituciones financieras de EEUU que emitieron contratos
de permutas financieras o garantías sin fondos contra la deuda se
encontrarán debiendo inmensas sumas de un dinero que no tienen.
Probablemente la reputación del sistema financiero estadounidense no
pueda sobrevivir al impago por las permutas financieras emitidas.
Por
tanto, el fracaso de la deuda soberana europea renovaría la crisis
financiera en EEUU, requiriéndose una nueva ronda de rescates y/o una
nueva ronda de “expansión monetaria cuantitativa”, es decir, de emisión
de billetes de banco para volver a pagar irresponsables instrumentos
financieros, cuya emisión solo sirvió para enriquecer a un pequeño
número de ejecutivos. (...)
Por lo tanto, el fracaso de la venta de bonos alemanes es un suceso
orquestado para castigar a Alemania y advertir al gobierno alemán para
que no obstruya la “unidad” o pérdida de soberanía individual del país. (...)
¿Quién gobernará la nueva Europa? Obviamente, la banca privada europea y Goldman Sachs." (Rebelión, 30/11/2011, 'Otra apropiación más de Goldman Sachs' ,Paul Craig Roberts , CounterPunch)
Otras interpretaciones en: http://ojeandoelestadodelpais.blogspot.com/2011/11/incluso-alemania-parece-ya-vulnerable.html
Artículo 129 de la Constitución española: Los poderes públicos... establecerán los medios que faciliten el acceso de los trabajadores a la propiedad de los medios de producción - Implantar la democracia económica en España es constitucional
30.11.11
La prueba de que la fallida venta de bonos alemanes fue algo orquestado la tenemos en la exitosa venta de los problemáticos bonos italianos que se produjo dos días después
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