21.9.17

¿Será Liberbank el próximo en caer?

"El sistema financiero español, y con él sus accionistas, depositantes y trabajadores, no gana para sustos. Después de aquel chiste que escuchamos hace unos años sobre la solvencia y salud de nuestros bancos, ahora vuelven a escucharse los tambores de crisis con Liberbank, una vez se dejó caer al Popular en manos del Santander.

La reciente historia nos ha demostrado que todas las instituciones han fallado en la reciente crisis bancaria que se ha saldado, de momento, con una abultada carga financiera para los ciudadanos, cantidad que nadie conoce con exactitud. Tanto el regulador, como el supervisor (Banco de España) miraron para otro lado e hicieron dejación de funciones, con el argumento que no tenían instrumentos suficientes para revertir la enorme burbuja de crédito que generó el sector inmobiliario.

 La locura generada entre inversores por los instrumentos financieros diseñados exprofeso para fondos de inversión y de pensiones, globalizaron el problema y extendieron la basura inmobiliaria entre millones de partícipes, muchos de ellos analfabetos financieros, víctimas de la codicia de bancos comerciales y de inversión.

La ausencia de reguladores y supervisores diligentes explica una parte de las quiebras y crisis financieras en España

Este proceso de globalización financiera, muy aplaudido por los que se creen lo de la eficiencia de los mercados de capitales y las expectativas racionales, afectó a miles de instituciones que, aún hoy, siguen sufriendo la digestión del pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Este virus sigue contaminando los balances de muchos bancos, no solo españoles, lo que se agrava en muchos caos, con la quiebra y disolución de muchas de las inmobiliarias que fueron el germen del problema. 

Por supuesto que, junto al deterioro de la salud contable y financiera de las entidades, la quiebra de muchas familias de ahorradores que fueron engañadas por directores de oficina bancaria para comprar preferentes o deuda subordinada, amén de otros productos igual o más complejos de entender.

El germen inmobiliario no se ha extirpado todavía de muchos balances bancarios

Este cáncer no se ha extirpado porque las causas que provocaron este quebranto siguen latentes. El negocio bancario es ruinoso con los tipos de interés nulos o negativos, por lo que la cuenta de resultados de los bancos se resiente y no acaban de lograr hacer rentable la concesión de crédito. El principal problema sigue siendo la acumulación de basura inmobiliaria en el balance, la morosidad del sector y la escasa transparencia que siguen mostrando hacia el exterior.

 Además, los mecanismos de control del supervisor, en este caso europeo, tampoco han avanzado de forma sustancial para que podamos confiar en que la próxima crisis se podrá combatir mejor y con menos coste para el consumidor. Tal vez el mecanismo de resolución bancaria europeo, estrenado con la compra del Popular por parte del Santander, sirva como mínimo avance, aunque se ha desarrollado con más preguntas que certezas y con la falta de transparencia europea que caracteriza a esta UE.

Ha sido precisamente el caso del Popular, con grave perjuicio para los pequeños ahorradores, los grandes e institucionales lograron salir antes, de forma misteriosa, lo cual confirma que en Bolsa los que siempre pierden son los minoritarios, sin que nadie haga nada por cambiar esta anomalía que persiste en el tiempo.

El caso del Popular ha sido el exponente de la inacción de las instituciones que ha generado el drama para mayoría de minoritarios

En el caso del Popular, la CNMV y el Banco de España dejaron durante meses, sin prestar ninguna atención, que la fuga de depósitos desangrase a la entidad, y sin que se tomase ninguna medida en Bolsa para evitar la especulación con las posiciones bajistas. Esta inacción ha sorprendido mucho tanto a analistas de buena fe, como a inversores institucionales extranjeros que no pudieron salir a tiempo, es decir aquellos que no están muy cerca del poder en España.

Ahora, con la crisis de Liberbank, y tras el escarnio público sufrido por la CNMV y el Banco de España, aquella ha decidido prolongar dos meses más la prohibición de las posiciones bajistas, veto que dura ya casi 5 meses. 

Se produce, además, en medio de un anuncio de ampliación de capital de la entidad que ha generado un desplome bancario, similar al que sufrió nada más caer el Popular, ya que su situación no es tan diferente de aquel, básicamente por la enorme exposición al riesgo inmobiliario, el reducido tamaño y la reducción del negocio tradicional. A esto hay que añadir que la absorción de la Caja Castilla La Mancha solo se puede entender como un castigo divino en medio de la corrupción política y financiera que se retroalimenta.

El reciente informe de la ESMA (la CNMV europea) advierte de los riesgos de contagio que puede tener el problema de Liberbank, no solo a nivel nacional, sino también europeo, por lo que se insta a tomar cualquier medida que evite su descapitalización y la fuga de depósitos. Esto contrasta con la pasividad para con el Popular, hecho que será utilizado por los defensores de los accionistas que han interpuesto miles de querellas por el quebranto del “regalo” del Popular al Banco de Santander.

 La gran pregunta que surge es si será suficiente prohibir las posiciones cortas o ampliar capital para salvar a una entidad en cuyo balance hay demasiadas bombas con efecto retardado, pensemos solo a qué se dedicaba la Caja de Hernández Moltó, por lo que cada vez se extiende más la sospecha que Liberbank acabará igual que el Popular, es decir en manos de algún grande por cero euros, teóricamente.

 No hay que olvidar que Liberbank llevaba ya una caída del 45% en Bola antes de la prohibición, a lo que hay que unir el batacazo del 27% el fatídico 2 de junio, por lo que no cabe ser optimista. Pero mientras esto ocurre, las noticias del sector inmobiliario no dejan de ser cada vez más preocupantes.  (...)

Como siempre pasa, la tormenta perfecta está cerca de tomar tierra y entre medias yo si fuera usted, sacaría todos mis ahorros de entidades como Liberbank."                    (Alejandro Inurrieta, Vox Populi, 18/09/17)

No hay comentarios: