2.1.13

Un pequeño país como Grecia puede ser una piedrita capaz de romper esa máquina gigante del motor ultraliberal. El botón sería la explosión del euro

"Nosotros en Grecia no tenemos ninguno de los dos puntos positivos. Ni crecimiento global ni coyuntura regional favorable.

–El peor de los mundos.
–Sí, pero al mismo tiempo tratamos de hacer de la necesidad virtud. Con esa visión participamos dentro de la Zona Euro. Grecia tiene solo el 2,5 por ciento del PBI europeo y a la vez está en el centro de la opinión pública mundial. Esto no pasa, claro, por el hecho de que todos se preocupen acerca del sufrimiento del pueblo griego. El temor es el efecto dominó.

–O sea que un punto fuerte de ustedes es el temor.
–Es que, si Europa sigue así, el principal país que pensará en salir de la Zona Euro es Alemania. Eso quiere decir que un pequeño país como Grecia puede ser una piedrita capaz de romper esa máquina gigante del motor ultraliberal. 

Por eso sufrimos un ataque frontal a nivel mundial en las últimas elecciones. Auguraban que vendría el caos. Quizá pueden aguantar mínimamente un escenario posneoliberal. Pero no lo pueden aceptar en el núcleo duro de Europa.

–La clave, pareciera, es la capacidad de daño de Grecia.
–Muchas veces comparé la situación de Grecia respecto de sus socios europeos con otras épocas. Es como la Guerra Fría. Los dos sectores pueden tocar el botón, pero aunque uno lo haga ninguno ganará. La catástrofe será para todos.

–¿Cuál sería hoy ese botón?
–El botón sería la explosión del euro. Pero el que pierda en esta Guerra Fría es el primero que dé un paso atrás. Por eso nosotros nos preparamos para un gran enfrentamiento. Hemos dicho claramente que desde el gobierno vamos a romper con los tratados de austeridad. 

Seguiremos en ese camino aunque nos corten los préstamos. No es un chiste. Lo vamos a hacer. Pero necesitamos el apoyo popular."     (Martín Granovsky, Página/12, Rebelión, 31/12/2012)     

No hay comentarios: