18.9.08

Progresamos adecuadamente en suicidio infaltil

“El suicidio es la tercera causa de muerte entre los 10 y los 14 años. La salud mental en los niños de países desarrollados preocupa a los expertos.

La salud mental de los preadolescentes (entre 10 y 14 años) está en peligro. La prueba más llamativa es el aumento de los suicidios, que son ya la tercera causa de los fallecimientos en este grupo de edad en los países desarrollados. Si el transcurso es el normal, esta situación se extenderá al resto del mundo, como pasa con casi todo. A un nivel menos grave, el 20% de los menores de 14 años sufre depresión, ansiedad, problemas de conducta o hiperactividad. Una proporción creciente, según especifica el primer informe que presentó ayer el Observatorio de Salud de la Infancia y la Adolescencia, una iniciativa del hospital infantil de Sant Joan de Dèu, en Barcelona, en el que se ha realizado un metanálisis que recoge datos de varios organismos como la OMS, la UE o la Encuesta Nacional de Salud, sobre la situación de la infancia. (…)

La situación es algo diferente en España. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2006 en España murieron 454 chicos de 10 a 14 años. De ellos, nueve (la undécima causa) se suicidaron. (…)

Según la experiencia de Jaume Pérez Pallarols, responsable del estudio, cada semana, entre tres y cinco niños ingresan en las urgencias psiquiátricas del hospital infantil de San Joan de Dèu, en Barcelona. De hecho, cada vez son más frecuentes los ingresos hospitalarios infantiles a causa de un amplio abanico de trastornos mentales. Los que más aumentan son la reacción grave al estrés y los trastornos de adaptación, las alteraciones de la conducta, los trastornos depresivos y la hiperactividad.

Los cambios sociales y culturales podrían estar detrás de este aumento de la patología mental infantil, señala Pallarols, aunque también es cierto que se diagnostica con mayor frecuencia, ya que hay una mayor conciencia y vigilancia por parte de padres, profesores y personal sanitario.” (El País, ed. Galicia, Sociedad, 17/09/2008, p. 37)

No hay comentarios: