18.5.09

Rebelión africana contra la Mafia italiana

"Quienes cuentan que la llegada de inmigrantes en pateras trae avalanchas de criminales, quienes cuentan que aumenta la violencia y la degradación, quizá estén olvidando dos episodios muy recientes y extremadamente significativos que han entrado en la historia de nuestra república. En Italia las dos revoluciones espontáneas más importantes contra la mafia no han partido de italianos sino de africanos. En diez años sólo se han producido dos veces, impulsadas por la indignación y el fin de la tolerancia, manifestaciones públicas no organizadas por asociaciones o sindicatos, sin autobuses y partidos.

Manifestaciones espontáneas. Y las han hecho los africanos. Quienes han gritado basta ya a los jefes de zona, a los clanes, a las familias, han sido los africanos. En Castelvolturno el 19 de septiembre de 2008, después de la matanza realizada por la camorra en la que fueron asesinados seis inmigrantes africanos... La revuelta atrajo a las cámaras de televisión de todas partes del mundo y las imágenes transmitidas fueron las de un pueblo paralizado para pedir atención y justicia. En los seis meses anteriores la camorra había asesinado a un número impresionante de inocentes italianos. (...)

Pero nada. Ninguna protesta. Ninguna queja. Ningún italiano se echó a la calle. Los pocos indignados, todos limitados al ámbito local, se sentían cada vez más solos y sin fuerza.Pero esta soledad se rompió por fin la mañana del 19, cuando cientos y cientos de hombres y mujeres africanos tomaron las calles y gritaron a los italianos a la cara su indignación. Hubo incidentes. Pero lo más extraordinario fue que al día siguiente los mismos africanos se hicieron cargo de reparar los daños provocados. El objetivo era llamar la atención y decir: "No volváis a atreveros". (...)

Y luego en Rosarno. En la provincia de Reggio Calabria, uno de tantos pueblos del sur de Italia con una economía principalmente agrícola que parecen marcados por un subdesarrollo crónico y cuyas bandas, en este caso las 'ndrine, facturan cifras equiparables al PIB del país. (...)

La familia Pesce-Bellocco de Rosarno, según demuestra la encuesta del GOA [Gruppo Operativo Antidroga] de la Guardia di Finanza de marzo de 2004, había decidido blanquear el dinero de la coca en la construcción en Bélgica, en Bruselas, donde debido a la presencia de las actividades del Parlamento europeo, las casas estaban aumentando de precio vertiginosamente. El clan conseguía inyectar unos 30 millones de euros a la semana en la compra de viviendas en Bélgica.

La hegemonía sobre el territorio era total, pero el 12 de diciembre de 2008 dos trabajadores de Costa de Marfil fueron heridos, uno de ellos muy grave. Esa misma tarde cientos de extranjeros -también ellos, igual que los jóvenes heridos, empleados y explotados en los campos- se reúnen para protestar. (...)

Y al hacerlo defienden a la ciudadanía por todos los calabreses, por todos los italianos. Defienden el derecho a trabajar y a vivir dignamente y defienden el derecho de la tierra. La agricultura era un recurso fundamental que los mecanismos mafiosos han disgregado lentamente, convirtiéndola en ámbito de especulaciones criminales. Todos los africanos que se rebelaron habían llegado a Italia en pateras. Y se rebelaron todos, clandestinos y legales. Porque a todos ellos las organizaciones les chupan la sangre, los recursos, el dinero. (...)

La omertà no les pertenece y tampoco la percepción de que todo ha sido siempre así y siempre lo será. La necesidad de abrirse nuevos espacios de vida no les obliga sólo a sobrevivir, sino también a defender el derecho. Y éste es el principio de cualquier batalla auténtica contra las bandas. (...)

Hoy, según demuestran las investigaciones del FBI y de la DEA, cualquiera que quiera realizar actividades económico-criminales en Nueva York, bien sean kosovares o jamaicanos, georgianos o indios, debe contar necesariamente con las familias italianas, que han perdido prestigio pero no respeto. Otro ejemplo clarísimo es el de Vito Roberto Palazzolo, que colonizó incluso Suráfrica convirtiéndola durante años en un lugar seguro para los fugitivos, igual que las familias italianas han conseguido transformar países del Este en colonias de inversión y, según demuestra el último informe de Legambiente, igual que las mafias italianas utilizan las orillas africanas para enterrar residuos tóxicos (en una sola operación en Costa de Marfil, se descargaron desde Europa 851 toneladas de residuos tóxicos).

¿Y este país dice que los inmigrantes traen criminalidad? Las mafias extranjeras en Italia existen y tienen una gran fuerza, pero son aliadas de las italianas.

Cuando se generaliza, se hace un favor a las mafias. Ellas viven de esta generalización. Quieren ser los únicos interlocutores. Si todos los inmigrantes se convierten en criminales conseguirán sentirse sus representantes y no habrá documento o llegada que ellos no gestionen. La mafia ucrania monopoliza el mercado de las asistentas y de los obreros de la construcción; los nigerianos el de la prostitución y la distribución de coca; los búlgaros el de la heroína; y el de los robos de coches los rumanos y moldavos. Pero éstos son una parte minúscula de sus comunidades y son instruidos por el crimen organizado italiano. Ninguna de estas organizaciones vive sin el consentimiento y la alianza de las mafias italianas.

Ninguna de estas organizaciones viviría una sola hora sin la alianza con grupos italianos.Tener una actitud cerrada y de criminalización ayuda a las organizaciones mafiosas, porque se obliga a todos los inmigrantes a relacionarse con las mafias, si sólo de ellas dependen los documentos, la vivienda, incluso los anuncios en los periódicos y la asistencia jurídica. Y no se trata de interpretar el papel de las "almas buenas", como dirían algunos, sino de analizar cómo las mafias italianas aprovechan la debilidad de las comunidades de inmigrantes. Cuanto menos protegidas están éstas por el Estado, más se encuentran a su merced." (ROBERTO SAVIANO: El valor olvidado. El País, ed. Galicia, Internacional, 17/05/2009, p. 8/9)

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