11.5.12

¿Podíamos dejar caer a Bankia... o es ya demasiado tarde?

"El contribuyente va a tener que poner mucho dinero para nacionalizar y sanear las cuentas de Bankia. De momento, la primera ayuda de casi 4.500 millones de euros ya se ha transformado en capital, dinero que está por ver que se recupere.

Aún así, ¿por qué no dejarlo caer? El economista Luis Garicano, en un artículo en el blog Nadaesgratis, da la clave: los avales y ayudas del Estado que ya ha recibido. España se enfrenta al destino de Irlanda.

Garicano, catedrático de la London School of Economics, defiende que "ojalá hubiéramos podido" y señala que ya es demasiado tarde para hacerlo.
El primer problema es el origen, ya que se ha creado una entidad sistémica cuya caída crearía grandes problemas.

 "¿Se puede saber por qué el gobierno sigue insistiendo, tras este fiasco, en tratar de fusionar para incrementar tamaño? ¿Es que no tenemos suficientes entidades sistémicas?", se pregunta.

Sin embargo, el principal incoveniente, según Garicano, es que "en los últimos meses nos hemos entrampado hasta las orejas con la deuda avalada para BFA y el resto del programa de la LTRO" (las megainyecciones de liquidez del BCE a tres años). ¿Por qué las inyecciones del BCE son tóxicas?.

 ¿Por qué no dejar caer Bankia, como él mismo defiende que sería lo ideal? La razón "es sencilla: la estatalización de las deudas ya se ha producido, debido precisamente a esa explosión de ayuda del BCE, y dejarlo caer no supondría ningún ahorro".

La liquidación tendría la siguiente forma: cerrar el banco, vender los activos (325.000 millones según el valor en libros), pagar a los depositantes (actualmente unos 173.000 millones) y el resto de acreedores que reciba lo que quede.

 "El problema es que el resto incluye al Estado, que pierde el dinero si o si. En otras palabras, la financiación ya se había comprometido. ¿Por qué? El programa de avales".

Las cuentas de Garicano, que cita un artículo de Xavier Vidal-Folch en el diario El País, son claras. Primero hay 28.500 millones de deuda avalada directamente por el Estado, avales que se introdujeron durante la crisis financiera por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero (y que luego defendió que estaban dando beneficios al Estado).

En segundo lugar, hay que añadir otros 40.000 millones en créditos a 3 años del BCE (avalados por el Banco de España, que los tiene registrados en su balance, que ha aumentado considerablemente por estas inyecciones de liquidez). Y en tercer lugarestán las preferentes ya mencionadas, por valor de 4.465 millones. En total, alrededor de 73.000 millones de euros.

En suma, el Estado y el Fondo de Garantía de Depósitos garantizan los 173.000 millones de depósitos más estos 73.000 millones de euros de ayudas, casi 250.000 millones de euros. Es decir, para que el Estado no perdiera dinero, "debes creer que una vez liquidada, los 350.000 millones de activos de Bankia valen más de 250,000 millones. Yo me temo que no es así. Estamos metidos, ya, hasta las orejas".

Ante la situación, el catedrático pide un plan en conjunto creíble para todo el sector porque en la Eurozona ya nadie cree las cuentas del sector financiero. Y asegura que no se podrá salir de esta sin ayuda de la Eurozona, aunque pide que el rescate sea de la banca y no del Estado."         (El Economista, 11/05/2012)


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