"(...) ¿Cree usted que la austeridad es una purga necesaria para recuperar la senda de crecimiento?
La realidad es que vamos camino de una década inmersos en un clima de
recesión y de austeridad. Digo esto porque el PIB por habitante estimado
para Francia en 2014 o 2015 es inferior al de 2006 o 2007. Esta es la
situación. Llevamos casi diez años de completo estancamiento de la renta
per cápita, de la riqueza del país, del poder adquisitivo…
A partir de
aquí podemos discutir todo lo que queramos sobre cuál tiene que ser la
recaudación del Estado, cuánto el gasto público o cuánto el peso del
sector privado en la economía, pero el hecho es que la riqueza total
disponible es inferior a la que había en 2007. No hemos recuperado el
nivel anterior a la crisis. Es normal que, en una situación como ésta,
el ambiente sea depresivo.
La idea según la cual hay
que insistir en purgar los presupuestos a base de más austeridad para
curar al enfermo me parece completamente insensata. Digo esto pensando
en Francia, pero lo mismo vale para Italia, con tasas de crecimiento
negativas en 2013 y en 2014.
Es verdad que el crecimiento en España es
un poco mejor ahora, pero no olvidemos que todavía sufre un retraso
considerable en términos de renta per cápita con respecto a las demás
grandes economías europeas.
El resultado global de
las políticas de austeridad en los últimos cuatro o cinco años es, de
manera objetiva, muy malo. Estados Unidos tenía una tasa de paro muy
similar a la zona euro hace unos años y hoy en día la diferencia es
enorme.
El paro disminuyó allí, a pesar de que el nivel de deuda de
ambas economías era muy similar en la situación de partida. No hay duda
sobre quién ha elegido la estrategia adecuada.
¿Qué otra estrategia tendría que haber seguido la zona euro para salir de la crisis?
Creo que es necesario poner en común las deudas públicas y los tipos de
interés (de la deuda pública). Francia y Alemania han sido
extremadamente egoístas. Han demostrado ser egoístamente miopes con
respecto a España e Italia al renunciar a compartir sus tipos de
interés. Una moneda única con 18 deudas públicas y 18 tipos de interés
asociados a esa deuda no funciona.
Los actores financieros no tienen
confianza en este sistema. Sólo podremos salir de esta crisis si creamos
un fondo común de deuda pública con un sólo tipo de interés. El Banco
Central Europeo podrá entonces estabilizar ese tipo de interés con menor
dificultad de la que tiene actualmente con 18 diferentes.
Ahora bien, si queremos gestionar la deuda de manera común necesitamos
también un Parlamento de la zona euro que tome decisiones a este
respecto, entre otras cosas sobre el nivel de déficit común.
Esto es lo
que ha faltado hasta ahora en las proposiciones de reorientación de la
construcción europea que Hollande ha esbozado en Francia, y de lo que
también se ha hablado en España e Italia. Finalmente no se han traducido
en una propuesta concreta de unión política y, al mismo tiempo,
presupuestaria. Ambas cosas son necesarias. (...)
Estamos realmente al borde del abismo de una crisis política, económica y
financiera. De acuerdo en que la crisis es responsabilidad de todos lo
países, pero no entiendo que Alemania siga pensando que tiene interés en
mantener esta visión tan rígida de la austeridad… a fin de cuentas, ni
siquiera allí el crecimiento es elevado.
Que conste que la
responsabilidad también es de Francia, por no hacer verdaderas
propuestas progresistas y de refundación democrática de Europa. Y
seguimos esperando propuestas de España y de Italia. (...)" ( Daniel Fuentes Castro
, Entrevista a Tomas Piketty, eldiario.es, 19/11/2014)
No hay comentarios:
Publicar un comentario