"(...) Desde antes de la crisis, vengo recogiendo opiniones —para mí muy
autorizadas e informadas— que sugieren que el verdadero riesgo para
Europa está en Italia. Es un país menguante en su riqueza que bloquea,
una y otra vez, cualquier intento de reforma, con una estructura
política tan fragmentada que hace milagro cualquier acuerdo
parlamentario.
Además, la bota italiana se ha estirado demasiado. El
país se parte en dos, con un sur muy distante en su nivel de vida,
sentimiento político y percepción de la realidad del norte. El
sentimiento nacionalista se ha exacerbado y en Italia lo hace con
sensibilidades muy distintas. (...)
El problema económico que implica el referéndum de Renzi es
que no se ha configurado como una consulta sobre las reformas sino como
una moción de confianza al propio primer ministro. Si Renzi se viera
obligado a dimitir, un adelanto de las elecciones podría alzar al poder a
cualquiera de los partidos de la oposición (todos ellos, en un grado u
otro, contrarios a la pertenencia de Italia a la Unión Monetaria).
El
aderezo es una crisis bancaria de dimensiones considerables cuya
evidencia sale ya hace tiempo de forma aparatosa por debajo de la
alfombra política. Para los que aspiran a hundir al euro, una nueva
oportunidad. Otra final. De ahí las alertas recientes del BCE
sobre una posible convulsión en los mercados tras el 4 de diciembre.
El
banco central probablemente actuará si es preciso redoblando su apoyo
al bono italiano cuya rentabilidad ha aumentado en las últimas semanas.
Cuatro días después del referéndum (8 de diciembre) está prevista una
reunión del Consejo del BCE, donde podrían tomarse nuevas medidas.
Hay todavía espacio para evitar la alarma en los mercados. Renzi,
a pesar de haberlo convertido en apuesta personal, no tendría por qué
dejar su cargo. Un sustituto solvente, si fuera el caso, también podría
proporcionar algo de la continuidad política que Italia precisa. Unas
elecciones adelantadas en medio de una eclosión de la crisis bancaria
serían el peor escenario. Después, llegará el caso de Francia, no menos
apasionante. De final en final." (Santiago Carbó, El País, 29/11/16)
No hay comentarios:
Publicar un comentario