"La Diócesis de San Sebastián decidió en abril de 2016 apartar al entonces vicario general de Guipúzcoa, Juan Kruz Mendizabal, alegando
supuestos motivos personales del afectado. Hoy se conoce que su salida
nada tuvo que ver con cuestiones subjetivas del prelado, sino que estuvo
motivada por los abusos sexuales a dos menores cometidos durante los años 2001 y 2005.
Jamás hasta ahora la Iglesia vasca había reconocido y pedido perdón por abusos sexuales
a menores cometidos en la propia casa. Ahora, la Diócesis de San
Sebastián ha admitido el primer caso de puertas para adentro, al
considerar probada la veracidad de las acusaciones vertidas contra el
sacerdote, a quien le han sido impuestas “diversas penas expiatorias” y otras “medidas administrativas y disciplinares”, tras ser juzgado por un tribunal canónico.
En todo caso, si la Iglesia vasca ha reconocido de forma pública la
culpabilidad de Kruz Mendizabal, ha sido en parte al verse forzada. La
decisión de los dos afectados por los abusos, hoy mayores de edad, de
dar a conocer los hechos en la tarde del martes mediante un escrito
informativo ha empujado a la Diócesis de San Sebastián a admitir horas
después este caso a través de un comunicado en el que concreta los
abusos sexuales en “tocamientos deshonestos”.
Los
dos afectados habían adoptado el compromiso de mantener en silencio
fuera de las puertas de la Iglesia los abusos a que fueron sometidos por
parte de Kruz Mendizabal durante la época en la que ejercía como cura en la parroquia de San Vicente de la Parte Vieja de San Sebastián y estaba al frente de un grupo juvenil de tiempo libre bautizado como Xirimiri Gazte Taldea.
Pero los rumores cada vez más extendidos entre los feligreses sobre
otro posible caso de abusos realizados por este cura les ha llevado a
hacer públicos los hechos para “animar a las posibles víctimas que
pudieran permanecer ocultas a que salgan a la luz”.
Los afectados se
habían dado por “agradecidos” con las penas impuestas al sacerdote
dentro de la Iglesia, pero “estos rumores abren un nuevo escenario en el
que cambian las circunstancias anteriores”, se defienden para
justificar su decisión de dar a conocer ahora este capítulo que “marcó
nuestras vidas”.
Resguardados en el anonimato, nunca han tenido la voluntad de emprender la vía judicial
para lograr un castigo al delito que sufrieron. Por eso, decidieron
limitar su denuncia al marco eclesial. Fue en marzo de 2016, momento en
el que trasladaron al obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, los
abusos a los que fueron sometidos por Kruz Mendizabal, un sacerdote muy
popular en Guipúzcoa conocido con el apodo de ‘Kakux’,
que un mes después fue destituido del cargo a la espera de la sentencia
canónica sin que la Iglesia desvelara los verdaderos motivos de su
salida.
Pero el caso podría conocer la vía de los tribunales, ya que la Fiscalía de Guipúzcoa ha decidido actuar de oficio,
de modo que va a incoar unas diligencias de investigación para
comprobar los hechos y determinar si interpone una querella contra el
sacerdote o emprende alguna acción penal por esta cuestión.
La fiscal
jefe de este territorio, Idoia Zurriarain, reclamará
documentación al Obispado y recopilará datos y posibles pruebas para
establecer si existe una base sólida para denunciar al ex vicario
general. Igualmente, el Ministerio Público, que puede actuar aunque las
víctimas decidan finalmente no denunciar los hechos, tratará de
establecer si se han podido dar otros casos de abusos al margen de los
ahora conocidos. Y es que no se descarta que aparezcan nuevos casos
durante el proceso una vez han salido a la luz los abusos a estos dos
menores.
Los afectados han querido dar la cara por las autoridades eclesiásticas
vascas, cuya actitud han reconocido. “Queremos dejar claro que nos
sentimos correctamente acogidos y atendidos por el obispo y por la
Iglesia”, destacan. Asimismo, ponen en valor que “desde el principio” se les recomendó “acudir a la vía civil”, al
margen de la denuncia en el marco eclesial, al que acudieron al pensar
que se trataba de “un caso aislado” y “por llevar las cosas con el mayor
sigilo posible”. (...)" (El Confidencial, 11/01/17)
No hay comentarios:
Publicar un comentario