"Los nuevos Presupuestos que presentamos a la Cámara son los
presupuestos más sociales de la historia de la democracia española”.
¿Suena esta frase? Es de Cristóbal Montoro, claro. Creo que no habrá
periódico, televisión o radio que no la haya recogido estos días. Y no
será por su novedad.
Lo que entrecomillamos arriba no corresponde a los
Presupuestos que acaba de presentar el Gobierno. La pronunció, así,
literalmente, el mismo Montoro el 23 de octubre de 2012, el año de los
macro recortes, de la llegada en tromba del PP para reducir derechos
sociales y prestaciones públicas.
Y hablaba de los Presupuestos del año
siguiente, 2013. Para este Gobierno decir que los Presupuestos son los
más sociales se ha convertido en algo así como para los periodistas
deportivos que cada trimestre califican un encuentro de fútbol como el
partido del siglo. La realidad es que ni los Presupuestos que presentaba
Montoro aquel 2012, ni los que acaba de presentar para este 2018 son
los más sociales de la historia de la democracia. (...)
Para comprobarlo hay varias maneras. (...) Otra forma, admitida en cualquier estadística seria, empleada por
ejemplo en la oficina estadística europea, Eurostat, es la de calcular
el porcentaje de gasto social sobre el dinero que genera ese año todo el
país, lo que se llama Producto Interior Bruto.
Visto así, el gasto
social de 2018 no sólo no es el más alto, sino que es el más bajo desde
el año 2009, es decir, desde que la crisis abarcó un año completo. El
dinero que ha destinado el Gobierno a gasto social representa el 16,2%
de todo el dinero que va a generar España este año, de todo el PIB.
También podemos mirarnos al espejo de la Zona Euro para compararnos. El
gasto público español (aquí incluyo también a comunidades autónomas y
ayuntamientos) supone el 40% de PIB. En el conjunto de la eurozona, el
gasto público representa el 47%. Significa que otros destinan más dinero
de la riqueza del país a satisfacer el bien público.
En gasto social,
incluidos salud y educación, España destina el 27% de su PIB, el
conjunto de la Eurozona el 32%. Sólo en pago a los parados nos
mantenemos en puestos de cabeza: en segundo lugar, por la lógica de
nuestra descomunal bolsa de desempleo. En el resto estamos por debajo de
la media. (...)
Repasamos.
El acceso a la vivienda. Debería ser
esencial cuando 160.000 familias han sido expulsadas de sus casas y los
jóvenes que trabajan reciben bajos salarios y apenas pueden costearse
una o viven en un alquiler encarecido. Este año, ha descendido de nuevo
la dotación presupuestaria en vivienda y es ya raquítica: 473 millones,
frente a 1.210 millones en 2011.
Fomento del empleo. Dinero para facilitar
un puesto de trabajo: ha caído un 22% desde que el PP llegó al
Gobierno. Este año sube la “astronómica cifra” de 217 millones de euros,
un 3,9%.
Dependencia. Dispone de 1.400 millones de euros, un 6,7% menos que en 2011.
Becas. Ha alcanzado por primera vez la cuantía que tenía al llegar Rajoy al Gobierno. Se destinan 1.450 millones, un 3,6% más.
Sanidad y Educación se financian casi en
su totalidad con dinero de las comunidades autónomas. Fueron el blanco
de los recortes. Ahora “cuando las cosas comienzan a ir bien” en
expresión de Rajoy, todavía disponen de 4.500 millones menos que en
2011.
Desempleo. El pago a los parados disminuye un 3,4%. Viene ocurriendo hace ya algunos años.(...)
En realidad los grandes beneficiados del actual presupuesto son los gastos militares.
Con 9.635 millones aumentan el 10%. Y copan el primer lugar en
inversiones, en armamento, con 2.164 millones. En este caso más de lo
que dispone el Ministerio de Fomento para construir carreteras o
ferrocarriles, que no llega a los 2.000 millones.
En Investigación y Desarrollo el dinero destinado es todavía un 17% menos que en 2011, pese a que entonces el Gobierno de Zapatero ya había metido la tijera. (...)
Me refería antes a los grandes beneficiados del actual presupuesto, al
señalar los gastos militares. No es del todo correcto. En realidad los
grandes beneficiados son los miembros del Tribunal Constitucional.
En el momento en que su papel está siendo clave para la estrategia del
Gobierno, este ha decidido subir el sueldo de sus magistrados, un 13% a
su presidente y un 12% a los magistrados rasos. Aquí no cabe análisis
presupuestario alguno, más allá de calificarlo de indecencia. " (Emilio de la Peña, CTXT, 04/04/18)
No hay comentarios:
Publicar un comentario