"La sede del Instituto Municipal de Servicios Sociales de Barcelona (IMSS) se ha convertido este miércoles por la tarde en el Hostal Collboni. Bajo el lema "si no tenemos casa, ocupamos el IMSS", cerca de ochenta personas de una quincena de sindicatos de vivienda y colectivos de la ciudad han ocupado durante casi tres horas las oficinas municipales de servicios sociales con maletas, utensilios de cocina, ropa tendida y otros objetos cotidianos para reclamar soluciones dignas para las familias desahuciadas.
Exigen la retirada del nuevo protocolo de Alojamientos Temporales de Urgencia, que limita su estancia en pensiones a seis meses, así como soluciones estructurales a la problemática de la vivienda en la ciudad. Los activistas y militantes de los colectivos que han convocado la acción han entrado en el IMSS cuando quedaban pocos minutos para que terminara el horario de atención al público. Han bloqueado las puertas de acceso y han llenado la recepción de las oficinas de maletas, ropa, neveras portátiles, taperos y utensilios de cocina para denunciar la situación en la que se encuentran las personas realojadas en pensiones después de haber sido desahuciadas.
En la entrada, han desplegado una pancarta gigante donde ponía 'Hostal Collboni' y han leído un manifiesto conjunto donde tildaban el Plan Dirección de "clasista, higienista y racista", denunciaban las dificultades que tienen las personas migradas para empadronarse y criticaban las medidas impulsadas por el Ayuntamiento, como el anuncio de retirar las licencias de pisos turísticos dentro de cuatro años, ya que consideran que "sólo retrasa la solución para una situación urgente". Después de una hora y media —donde las activistas y militantes han aprovechado para hacer un pica-pica, jugar a juegos de mesa en la recepción y entonar cánticos como “mirad lo que se ha encontrado: ¡barrios organizados!”—, la gerente del Área de Derechos Sociales del Ayuntamiento, Marta Clari Padrós, ha bajado, junto a otros trabajadores del IMSS, a hablar con miembros de varios sindicatos de vivienda. Sin embargo, no se ha podido llegar a ningún entendimiento y los colectivos que habían convocado la acción han decidido resistir dentro de las oficinas hasta conseguir el compromiso del IMSS de echar atrás con la aplicación del nuevo protocolo de alojamientos temporales de urgencia. Finalmente, alrededor de las 20 horas un amplio despliegue de antidisturbios de la Guardia Urbana y de los Mossos d'Esquadra -con cuatro furgones y cerca de veinte agentes- han desalojado por la fuerza a las personas que todavía estaban dentro de las oficinas. Un miembro del Sindicato de Inquilinos ha sido retenido durante unos minutos y ha sido identificado.
La acción ha sido convocada por los sindicatos de vivienda de Gràcia, Nou Barris, Verneda-Besòs, Vallcarca y Les Corts, el Sindicato de Alquiladoras, la PAH Barcelona, el Sindicato de Barrio de Poble Sec, los grupos de vivienda de Sants y de los Tres Turons, la Red de Apoyo de la Trinitat Vella, la CGT Servicios Sociales y los colectivos Sindillar, No en la Copa América y Resistimos al Gòtic. Guardia Urbana y Mossos d'Esquadra han desalojado por la fuerza a los activistas | Augusto Magaña El nuevo protocolo de alojamientos temporales, en el punto de mira La principal reivindicación de los colectivos que han ocupado el IMSS giraba en torno al nuevo sistema de gestión de los Alojamientos Temporales de Urgencia (ATU), que se ha puesto en marcha este junio y contempla limitar a seis meses la acogida en pensiones de personas y familias que han sido desahuciadas, entre otras medidas.
"Rechazamos este nuevo protocolo porque no aporta absolutamente ninguna solución al problema estructural de la vivienda y simplemente lo que hace es limitar aún más la estancia a estas pensiones", ha asegurado Judit Esposa, del Sindicato de Vivienda de Gràcia. Estos colectivos y sindicatos de vivienda han señalado directamente al alcalde Jaume Collboni y la segunda teniente de alcaldía y concejala de Derechos Sociales, Maria Eugenia Gay, de querer “vaciar los hostales ahora que viene la temporada turística” y verter muchas familias a "vivir en situaciones precarias, en los márgenes de la ciudad", como ha remarcado Irma Samayoa, de la plataforma Resistim al Gòtic.
En este sentido, Francesca Poggi, de Sindillar, ha criticado que el consistorio ejerza una "política de presión hacia las vecinas", con medidas como el Plan Endreça o las dificultades para el empadronamiento, al tiempo que se impulsan iniciativas como la Copa América y otros “macroeventos pagados con dinero público que masifican, gentrifican y elitizan cada rincón de la ciudad”. Samayoa también ha reprochado que desde el Ayuntamiento se defienda que el nuevo protocolo se impulsa para "promover la autonomía a través de ayudas directas", porque "no se dan cuenta de que muchas de estas familias están excluidas de un mercado privado de vivienda que es racista y aporofóbico, donde las inmobiliarias juegan un papel de presión para que sólo las personas con mayor capacidad económica tengan acceso a la vivienda”.
Por este motivo, los colectivos que han convocado la acción han exigido al consistorio soluciones estructurales a la problemática de la vivienda, como la expropiación de viviendas vacías de grandes tenedores y el aumento del parque público de vivienda . Aunque la acción no ha conseguido forzar a la dirección del IMSS a echar atrás con la implementación del nuevo protocolo de alojamientos temporales de urgencia, el Pleno Municipal tendrá que votar este viernes una moción que pide su paralización, impulsada por la CGT con el apoyo de los Comunes.
Al respecto, los colectivos que han convocado la acción esperan que los grupos políticos municipales acaben posicionándose en contra del protocolo y han puesto el foco especialmente en Esquerra Republicana, quien todavía gobierna en la Generalitat y se encuentra ahora mismo en negociaciones para entrar en el Gobierno municipal.
Mientras, los sindicatos de vivienda ya han avisado de que no se detendrán hasta que se eche atrás con este nuevo protocolo y hasta que se garantice soluciones dignas a las personas desahuciadas. "Prometemos una temporada de verano sin descanso para el Ayuntamiento", ha señalado Esposa." (Augusto Magaña, Social.Cat, 27/06/24)
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