10.1.25

Rafael Poch: Temo que no veremos este año el fin de la guerra en Ucrania... Rusia sigue avanzando y está menos agotada que Ucrania. De momento Moscú no tiene problemas de reclutamiento de voluntarios, porque les paga 2100 dólares al mes... y cantidades enormes que están solucionando la vida a regiones pobres enteras de Rusia. En cambio, Ucrania tiene un serio problema de personal. Hay muchas deserciones y aun más escaqueo. Están movilizando a cincuentones... Estados Unidos quiere desentenderse y los aliados europeos están desconcertados. ¿Cómo dar marcha atrás sin reconocer sus propias responsabilidades en la génesis de la guerra ni perder la cara? ¿Qué será de la OTAN en tal caso? Las naciones junto a la frontera de Rusia, desde los Balcanes hasta Polonia y Bielorrusia, empezarán a hacer sus propias componendas”. Eso ya está ocurriendo con Eslovaquia, Hungría, incluso Bulgaria y Georgia. Es la posibilidad de una autonomía europea y de su integración en un marco euroasiático con motor chino, lo que está en disputa... Rusia cree que mediante una alianza con Pekín y potenciando el movimiento de los Brics y las relaciones con el Sur global, logrará mantener mucho mejor su soberanía... Me parece que en Bruselas aún no se han enterado de esto... Al mismo tiempo, la guerra ha ofrecido una prórroga a las contradicciones del régimen bonapartista ruso... Una prórroga para transformarse mediante un nuevo contrato social con su población que está siendo formulado bajo la certeza de un endurecimiento del autoritarismo y la promesa de una mayor nivelación social

"(...) ¿Veremos este año el fin de la guerra en Ucrania?

Me temo que no. Hoy por hoy, Rusia sigue avanzando y está menos agotada que Ucrania. De momento Moscú no tiene problemas de reclutamiento de voluntarios, porque les paga 2100 dólares al mes, más 4000 al firmar el contrato y decenas de miles de dólares si son heridos o muertos. Son cantidades enormes que están solucionando la vida a regiones pobres enteras de Rusia. En cambio, Ucrania tiene un serio problema de personal. Hay muchas deserciones y aun más escaqueo. Están movilizando a cincuentones. Tanto en Ucrania como en Rusia y en la UE, hay una clara mayoría favorable a la negociación, pero en lugar de desescalar se exige a Kiev bajar la edad de reclutamiento a los 18 años, lo que provocaría una estampida general. Ambos países ya cuentan con un enorme ejército de mutilados, viudas y huérfanos. Moscú solo negociará un arreglo que satisfaga su objetivo de recuperar el estatuto de neutralidad para Ucrania con veto para la OTAN. Nunca aceptará tropas de paz de la OTAN en Ucrania, ni devolver las regiones de las que se ha apropiado, ni la pertenencia de Ucrania a la alianza. Estados Unidos quiere desentenderse y los aliados europeos están desconcertados. ¿Cómo dar marcha atrás sin reconocer sus propias responsabilidades en la génesis de la guerra ni perder la cara? ¿Qué será de la OTAN en tal caso? Biden lo formuló muy claro en su entrevista del 4 de junio con la revista Time: “si dejamos caer a Ucrania, todas esas naciones junto a la frontera de Rusia, desde los Balcanes hasta Polonia y Bielorrusia, empezarán a hacer sus propias componendas”. Eso ya está ocurriendo con Eslovaquia, Hungría, incluso Bulgaria y Georgia. Es la posibilidad de una autonomía europea y de su integración en un marco euroasiático con motor chino, lo que está en disputa. Así que se continua con la narrativa de la amenaza rusa, lanzando misiles de largo alcance y propiciando atentados en Moscú. Es muy contradictorio que digan que Rusia, que ya está agotada con Ucrania, podría atacar países europeos de la OTAN y que consideren, al mismo tiempo, que la pertenencia de Ucrania a la OTAN es la “garantía de seguridad” que impediría un nuevo ataque ruso.

¿La guerra de Ucrania ha cambiado a Rusia? ¿En qué sentido?

Rusia está cambiando mucho. La elite rusa ya no quiere integrarse en Europa, donde solo le ofrecían un papel subalterno incompatible con su identidad de gran potencia, sino vincularse a la pujante China y al Sur Global emergente. Cree que mediante una alianza con Pekín y potenciando el movimiento de los Brics y las relaciones con el Sur global que estuvo en buena sintonía con la URSS, logrará mantener mucho mejor su soberanía a medio y largo plazo en un mundo multipolar con varios centros de poder. Me parece que en Bruselas aún no se han enterado de esto. Al mismo tiempo, la guerra ha ofrecido una prórroga a las contradicciones del régimen bonapartista ruso, a su falta de pluralismo y alternancia en el poder. Una prórroga para transformarse mediante un nuevo contrato social con su población que está siendo formulado bajo la certeza de un endurecimiento del autoritarismo y la promesa de una mayor nivelación social. Respecto a las sanciones, de momento han fracasado: Rusia crecerá este año un 4%, más que cualquier otro país de Europa, y los salarios suben. De momento el keynesianismo de guerra está funcionando. La pregunta es si será sostenible a más largo plazo y si la UE, que de momento no tiene capacidad industrial para vencer a Rusia militarmente, puede dotarse de ella en cinco o seis años."

(Entrevista a Rafael Poch, Anna Balcells para el Punt Avui, blog, 07/01/25)

No hay comentarios: