"Los equipos de rescate de Gaza ya han recuperado cientos de cadáveres de entre los escombros en Gaza en menos de una semana desde que comenzó el alto el fuego, según informaron el miércoles funcionarios de Gaza, y miles de cuerpos de palestinos más siguen atrapados.
La agencia palestina de defensa civil e instalaciones médicas han informado de que desde que comenzó el alto el fuego el domingo se han recuperado unos 200 cadáveres de entre los escombros.
Hasta 248 muertos se han sumado a la cifra oficial de víctimas mortales, y los centros sanitarios han informado de que han recibido 54 cadáveres en las últimas 24 horas, una mezcla de los rescatados de entre los escombros y las aparentes violaciones del alto el fuego por parte de Israel en los últimos días.
Según el recuento oficial, el número total de víctimas mortales del genocidio asciende a 47.161 personas, con más de 111.100 heridos.
Como demuestran las labores de rescate, es probable que la cifra real sea mucho mayor, ya que miles de personas siguen desaparecidas.
Según un estudio reciente publicado en The Lancet, es probable que el número de muertos sólo por lesiones traumáticas supere las 64.000 personas, un 40% más que la cifra oficial, y eso sin contar las muertes por otras causas, como el hambre y las enfermedades.
Las autoridades calculan que aún hay 10.000 cadáveres atrapados bajo los escombros, entre ellos miles de niños. Cada uno de estos cadáveres representa a un miembro de la familia, un amigo o un vecino que desapareció en medio del genocidio, algunas de cuyas muertes se presumen, pero nunca son confirmadas por sus seres queridos.
Es posible que algunos cuerpos no se encuentren nunca. Se calcula que los ataques israelíes han evaporado unos 2.840 cadáveres, imposibles de contar porque ha desaparecido todo rastro de ellos, según ha declarado Mahmoud Basel, portavoz de la defensa civil de Gaza. Otros pueden estar enterrados en fosas comunes sin identificar.
Muchos cuerpos fueron despedazados por las bombas israelíes y quedaron completamente irreconocibles, lo que obliga a los palestinos a buscar cualquier resto que pueda identificarlos, como un jirón de camisa o un zapato.
«Mis hijos siguen bajo los escombros. Estoy intentando sacarlos», dijo Mahmoud Abu Dalfa a Reuters, afirmando que él y los trabajadores de la defensa civil carecen de herramientas para excavar a su familia, asesinada en los primeros meses del genocidio. «Mi mujer fue asesinada junto con mis cinco hijos: tres hijas y dos hijos. Yo tenía trillizos».
«Espero poder sacarlos y hacerles una tumba. Es lo único que quiero de todo este mundo. No quiero que me construyan una casa ni que me den nada más. Lo único que quiero es una tumba para ellos: sacarlos de aquí y hacerles una tumba», declaró Abu Dalfa.
Según evaluaciones por satélite de la ONU, en diciembre había 50 millones de toneladas de escombros en Gaza, con más de 170.800 estructuras dañadas o destruidas por los bombardeos israelíes. La retirada de los escombros llevaría 21 años como mínimo, según las autoridades, y costaría hasta 1.200 millones de dólares."
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