"Nadie se podía imaginar que el nuevo gobierno de la Comunidad de Madrid se quitara la careta cuando ni siquiera la presidenta Isabel Díaz Ayuso ha sido investida en la Asamblea. No han esperado ni unas semanas para empezar a aprobar medidas que sólo favorecen a los ricos, mientras que se retiran prestaciones para las clases medias y trabajadoras.
El gobierno de la Comunidad de Madrid aprobó una serie de medidas antes de las elecciones que no fueron hechas públicas hasta la semana posterior a los comicios porque, evidentemente, podrían tener un impacto negativo en los votantes.
Una de ellas es la aprobación de nuevas ayudas directas para la contratación de empleadas del hogar. El «cheque canguro» se pretendió vender como un modelo de conciliación de la vida familiar y laboral cuando, en realidad, es una ayuda directa para aquellas familias que tienen capacidad económica para contratar servicio doméstico.
Según el comunicado de la Comunidad de Madrid, se trata de «ayudas directas de hasta 4.000 euros para sufragar los costes laborales de la persona o personas empleadas de hogar que hayan estado contratadas en el periodo subvencionable».
El truco está en cómo se valora quiénes tienen acceso a dichas ayudas directas. Aquí hay un truco para ocultar que esta medida está dirigida a familias con capacidad económica alta, puesto que no se miden los ingresos de la unidad familiar, sino que los topes de hasta 30.000 euros son «per cápita». Por ejemplo, una familia con dos progenitores y cuatro hijos menores de 12 años con unos ingresos de 150.000 euros anuales tendrían derecho.
Por otro lado, aunque la convocatoria de estas ayudas señala que las rentas familiares menores de 20.000 euros también pueden acceder a este «cheque canguro», la realidad es que no cubre el coste total de la trabajadora de hogar contratada, sino que sólo «se abonará un importe equivalente a las cuotas de la Seguridad Social ingresadas por el empleador (con un incremento del 25%) en un porcentaje fijado en función de la renta per cápita familiar, que podrá llegar al 100% en el caso de familias monoparentales o aquellas con rentas inferiores a 20.000 euros».
Una familia monoparental o con una renta de menos de 20.000 euros anuales no puede sufragar la contratación de una trabajadora del hogar para el cuidado de sus hijos.
Ayudas a las fincas forestales privadas
Otra de las medidas para ricos aprobadas por la Comunidad de Madrid es la convocatoria de ayudas para «actuaciones en montes de titularidad privada con el objetivo de favorecer el desarrollo sostenible, mejorar su gestión forestal y contribuir a su recuperación en caso de haber sido dañados».
Los montes de titularidad privada son las fincas de los ricos, porque las clases medias y trabajadoras no suelen disponer de este tipo de activos.
Según reconoce la Comunidad de Madrid, desde que gobierna Isabel Díaz Ayuso, «cada año se benefician de estas ayudas alrededor de 40 titulares de terrenos, que podrán alcanzar hasta el 100% del importe total, con un máximo de 40.000 euros por persona».
Temor en las familias trabajadoras
Mientras la Comunidad de Madrid aprueba partidas de millones de euros para los ricos y clases privilegiadas, aún no ha confirmado si prorrogará de manera unilateral las rebajas del abono transporte o si volverá a los precios originales que, en la situación actual, hacen muy difícil su sostenimiento por las familias de clase media y trabajadora.
La rebaja de los abonos transporte vino propiciada por las reformas del gobierno de Pedro Sánchez para paliar las consecuencias de la guerra de Ucrania. Ayuso nunca fue partidaria de compartir una subvención con el Ejecutivo central. Sin embargo, la ciudadanía lo demandaba y lo aplicó.
Sin embargo, ahora mismo no existe una confirmación de la Comunidad de Madrid de que vaya a prorrogar esas ayudas al transporte público, independientemente de si el gobierno de Pedro Sánchez prorroga las medidas o no.
Cuando Isabel Díaz Ayuso fue preguntada por este asunto afirmó que «tomaremos una decisión acerca del precio del transporte cuando lo haga el Gobierno, teniendo en cuenta que esto era cosa de dos».
Sin embargo, para muchas familias de clase media y trabajadora se hace ya inasumible el coste del abono transporte que, en dependiendo las zonas, puede llegar a triplicarse. En Madrid, el transporte público es fundamental, principalmente, para acudir a trabajar.
En consecuencia, el gobierno de la Comunidad de Madrid tiene la
oportunidad de demostrar a la ciudadanía que puso su confianza en Isabel
Díaz Ayuso que es falso que sólo gobierna para los ricos, por más que
los hechos y las medidas aprobadas muestren que se quiere convertir el
territorio en una zona exclusiva para clases privilegiadas." (J. A. Gómez, Diario16, 14/06/23)
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