"(...) Irán solo tiene dos maneras viables de responder al ataque. Una es, como explica Scott Ritter , un ataque destructivo y abrumador contra el propio Israel. Esto debe ser lo suficientemente duro para Israel como para pedirle a Estados Unidos que negocie el fin de la guerra. Sin embargo, esto conllevaría el riesgo de ataques nucleares por parte de Israel contra Irán.
Otra posibilidad es tomar represalias contra la potencia que está detrás de Israel y que conspiró con él para lanzar el ataque. Existen objetivos estadounidenses en Oriente Medio que Irán podría atacar fácilmente. Pero la respuesta de Estados Unidos sería una guerra aérea y de misiles que desbordaría cualquier defensa que le quede a Irán.
Un ataque contra Estados Unidos se centraría en su economía. Irán puede detener su producción de petróleo. Cuenta con diversos medios para detener la producción de petróleo y gas en países aliados de Estados Unidos situados en su vecindad. Puede cerrar el Estrecho de Ormuz, por donde fluye el 25% de la producción mundial de hidrocarburos. Estados Unidos apenas podría hacer para evitar que Irán mantenga dicho bloqueo.
Como ya he dicho anteriormente :
Trump quiere precios del petróleo más bajos y libertad para llevar adelante su agenda interna.
Unos meses con precios del petróleo por encima de los 200 dólares por barril arruinarían las posibilidades de los republicanos de conservar la Cámara de Representantes y el Senado. Arruinarían la presidencia de Trump, quien se vería obligado a pedir la paz a Irán.
Habría graves daños colaterales en la economía mundial. Irán sería el culpable. Pero todos sabrían también que no fueron Irán ni su líder quienes iniciaron esto."
( Moon of Alabama, Observatorio de la crisis, 13/06/25)
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